[Experiencias roleras] Desaya nos escribe sobre Odin Sphere.

¿Qué tal va todo visitantes de Destino RPG? Hacía tiempo que no me animaba a publicar algo en Destino RPG (típica vagancia veraniega xD) pero hoy sí me apetecía y voy a hablaros de Odin Sphere, un juego de PlayStation 2 que, recientemente, se ha vuelto a poner de actualidad tras el anuncio del remake que se va a realizar para PlayStation 3, PlayStation 4 y Vita, con el nombre de Odin Sphere: Leifdrasir.

Mi historia con Odin Sphere fue un tanto curiosa. Había oído y leído sobre el juego pero la verdad es que nunca me había llamado jugarlo, era el típico juego que no te atrae demasiado en un principio y, al tener otros juegos disponibles, pues pasas de él. Un craso error que, por suerte, pude corregir. Un día, hace unos siete años fui a cotillear al Game (me gusta mucho cotillear el Game, comprar ya no tanto xD) y en la estantería de PlayStation 2 vi varios juegos a cinco euros. Mi primer pensamiento fue “estarán el de Shrek, Barbie jinete mágica, el FIFA de hace seis años y algún Singstar” y, efectivamente, estaban esos pero entre ellos estaba un Odin Sphere. Lo cogí sin dudarlo, total, por cinco euros tampoco pierdo mucho... Y no sólo no perdí nada. si no que al llegar a casa y ponerme a jugar me enamoré desde el minuto 1.

En esta entrada intentaré explicaros porque me fascinó tanto este juego y ojalá que os pueda animar a probarlo, bien sea ahora si podéis hacerlo en vuestras antiguas PS2 (O emulador) o en el futuro, cuando Leifdrasir salga a la venta, ya que en enero de 2016 estará disponible en Japón y Atlus ya ha anunciado que lo traerá a occidente durante el próximo año.

Así, pues, vamos a analizar la maravilla que podemos encontrar dentro de la Esfera de Odín:

Odin Sphere nos sitúa en el mundo de Erion que está dividido en cinco grandes áreas: Ragnanival, que es el hogar de Odín, Señor de los demonios y sus huestes de valkirias; Endelfia, hogar de Odette, la Reina del Inframundo y la muerte. Ringford, el bosque de las hadas gobernado por la hermosa reina Elfaria. Vulcania, los dominios del rey del fuego Onix y Titania, el reino de los humanos, gobernada en la actualidad por el rey Edmundo.

Estos cinco reinos suelen estar en conflicto casi permanente debido a que en Erion existen unos extraños y poderosos minerales conocidos como Psiferitas, que entre otras aplicaciones se utilizan como poderosas armas. Estos minerales sólo se pueden obtener de dos maneras, de forma natural en el reino de Endelfia (se caracterizan por su color azul) o de forma artificial mediante su fabricación en el Caldero, una terrible máquina de destrucción masiva. Quien tenga el control del Caldero, tiene prácticamente asegurado el control del mundo, pero el problema es que este Caldero crea las Psiferitas (de color rojo, en este caso) absorbiendo fozones, que viene siendo la energía mágica y vital de la que se compone cada ser de este mundo y eso puede llevar a la destrucción del mundo si se emplea incorrectamente.

Este sería un muy breve resumen de la situación del mundo en el momento en que empieza el juego. Nada más empezar encarnaremos a Alicia, una curiosa niña que, junto a su gato Sócrates, investiga unos misteriosos libros de su buhardilla. Cada uno de ellos será una pieza del gran puzzle que conforma la historia de Odin Sphere y cada uno de esos libros nos transportará al pedazo de historia de cada uno de los cinco protagonistas del juego que han servido para que el mundo acabase como Alicia lo conoce.

Estos cinco guerreros (cada uno tiene su libro propio) serán Gwendolin, una valquiria hija de Odín. Cornelius, hijo del rey Edmundo. Mercedes, princesa del reino de las hadas. Oswaldo, un misterioso y cruel caballero oscuro y Velvet, una misteriosa chica que se dedica a recopilar las profecías que anuncian el fin del mundo. ¿Como funciona a nivel argumental todo esto? Muy simple, a través de cada personaje veremos un fragmento de la historia global de Odin Sphere.

Empezaremos con Gwendolin y, a lo largo del juego, nos iremos encontrando con el resto de los personajes y visitando las zonas propias de cada uno, pero a la vez los otros cuatro personajes estarán también en marcha en otras zonas del mundo, siguiendo sus propios objetivos que, en ese momento, no sabremos y tendremos que superar la historia de Gwendolin para al elegir el libro de otro personaje. De esta forma, jugando su historia, podremos saber qué estaba haciendo en otros momentos en los que no sabíamos de su localización u objetivos, ya que cada personaje tiene su propia ruta y no todos visitan los mismos sitios o, si lo llegan a hacer, lo hacen en diferentes espacios temporales.

Esto nos deja una situación en la que es imprescindible pasarse la historia de los cinco para entender la trama del juego como algo global y, sobre todo, para desbloquear el libro final, que une de forma definitiva el destino de los cinco para descubrir el gran desenlace final de la historia. Parece muy lioso así explicado pero os aseguro que funciona realmente bien (sobre todo mola encajar piezas del argumento si juegas un Nuevo Juego+, descubriendo cosas en las que no habías caído en una primera vuelta, ahora que ya conocías por qué cada uno hace lo que hace) y aporta bastante variedad al juego. No voy a desvelar ningún spoiler pero la historia, en mi opinion, es excelente, con giros inesperados, amor, muertes, traiciones... Nos sorprenden muchas veces y te acabas encariñando mucho con los personajes, tanto los principales como los secundarios (que son muchos y algunos extraordinarios), de hecho puedo decir que es de los pocos juegos que he probado en mi vida que tienen ciertas escenas y momentos que no me han hecho llorar... Pero casi, con escenas que siempre que las veo y por mucho que sepa que van a suceder, hacen que me recorra un escalofrío por el cuerpo.

Odin Sphere es un RPG peculiar. Todo el título se desarrolla en un entorno en 2D y sólo te puedes mover a derecha, izquierda y hacia arriba de forma limitada (esto lo van a corregir en el remake, con escenarios mas verticales y grandes). 

Cada zona del mapa se divide en varios escenarios circulares. Empiezas en un punto concreto y el objetivo de cada área es llegar a la “meta”, que normalmente suele ser un jefe. Cada escenario tiene una o varias salidas y cada una lleva a otro mapa distinto, lo acaba creando un mapa general de pequeños mapas circulares, cada uno con diferentes salidas, que puedes recorrer a tu gusto. En ellos, hay zonas de descanso donde puedes comprar objetos o hablar con NPCs, pero lo normal es que en cada zona te encuentres enemigos que combates utilizando el arma propia de cada personaje (los cinco tienen armas creadas con psiferitas). 

El sistema de combate es como cualquier Beat ' em 'up que se os ocurra, a base de combos y ataques con dichas armas debemos acabar con los enemigos que nos ataquen, hay ataques mágicos (escasos) y ataques o técnicas especiales con arma, más potentes, que se utilizan de forma limitada con un contador que evita su uso indiscriminado. Los combos normales también están limitados por una barra de vigor que, si no somos cuidadosos, se puede agotar y dejarnos muy vendidos ante el enemigo (se recarga sola pero hay que tener cuidado de no quemarla demasiado) por lo que todo esto aumenta un poco la complejidad y estrategia de combate, que no nos permite hacer del juego un machacabotones puro y duro. Tampoco es que sea el culmen de la complejidad y la dificultad, hay que reconocerlo, pero es un sistema muy bueno para equilibrar las cosas, sobre todo en las batallas contra los jefes que, aparte de espectaculares, suelen ser mucho mas desafiantes que las hordas de enemigos normales que nos vamos encontrando. 

Además al acabar cada mapeado, el juego nos otorgará una puntuación y un rango que, en función a ellos, nos premiará con una recompensa en forma de cofre con multitud de objetos. Por supuesto, a mayor rango mejor recompensa, algunas exclusivas de los rangos máximos, por lo que el juego invita a mejorar nuestras puntuaciones para hacernos con todo. 

El desarrollo de los personajes también es particular. El potencial de ataque de cada uno se mide con el nivel de psiferita y cada vez que matamos un enemigo, éste suelta fozones (también pueden dropear objetos) que debemos absorber con nuestra arma para ganar experiencia y, cada cierto número de fozones, nuestro nivel de personaje. El sistema para subir el nivel de vitalidad (los puntos de salud de toda la vida) es incluso más curioso, ya que para desarrollarlo tendremos que ir comiendo los alimentos que vayamos encontrando por nuestra aventura. Lo que parece un sistema simple se complica cuando llegamos a la Aldea Puka, donde sus simpáticos habitantes regentan dos restaurantes en los que, si tenemos dinero y los ingredientes necesarios, nos podrán cocinar multitud de recetas (que se encuentran a lo largo del juego) que darán muchísima experiencia y nos obligan a pensar cómo optimizar recursos ¿Cocino este carpaccio que da mucha experiencia y PS pero cuesta una pasta en ingredientes y oro... O me como dos tortillas pequeñas que no suben tanto pero me ahorro varios recursos? Puede parecer poco desarrollo pero os aseguro que subir ambos niveles es costoso. No es necesario el farmeo radical en este juego para pasárnoslo, pero si quieres maximizar a los cinco personajes... Prepárate para sudar sangre. Yo, a día de hoy no lo he conseguido, los tengo bastante desarrollados pero muy lejos de su máximo potencial en ambos aspectos. [Nota de Adell: Y Desaya es de los que intentó sacar el 100% de los drops de cada enemigo de Dragon Quest VIII, por ejemplo. xD]

Aparte de todo esto, es posible equipar un accesorio en cada personaje (no hay una gran variedad, por desgracia) y crear con alquimia diversas pociones de diferentes aspectos, siempre que tengas la receta para ello. Desde pociones curativas, a ofensivas o especiales, como una que crea fozones u otra que crea dinero, dando variedad al conjunto. 

El inventario también es limitado, por lo que toca planear que llevar encima en cada momento y muchas veces habrá que descartar objetos por falta de capacidad. Los personajes también son bastante diferentes entre si, no es lo mismo jugar con Gwendolin y su lanza que con Mercedes y su ballesta, algunos son más rápidos, otros pueden planear o incluso volar... Ahí tampoco hay queja: La variedad es evidente.

En mi humilde opinión, el apartado visual de Odin Sphere es, simplemente, precioso. Es como un cuento de hadas dibujado a mano y cada zona es muy diferente de la anterior, los personajes están muy bien animados y verlo todo en movimiento es una maravilla... Salvo porque en momentos en los que se acumulan muchos enemigos en pantalla, que el juego sufre con problemas de lag que da gusto, con bajadas de frames importantes. Son momentos puntuales y tampoco es que estropeen mucho la experiencia, te acabas acostumbrando, pero es un punto flaco y por muy fanboy del juego que sea hay que reconocerlo. 

El apartado sonoro es también muy bueno, con melodías de todo tipo, algunas de ellas con la cualidad de que se te queden en la memoria por mucho tiempo y que acompañan muy bien todo lo que vemos en el juego, bien sea un momento triste, épico o alegre. Nunca podré olvidar “A Fate Accepted” o el tema principal. Son melodías que estarán ahí siempre. Las voces y diálogos del juego rinden a gran nivel también, no está doblado a castellano pero si que tiene los textos traducidos.

Reconozco que soy un fanboy irremediable de Odin Sphere (y más fanboy aún de Velvet y Mercedes xD) pero es que no puedo dejar de pensar que este título es excelente. Es un juego en el que, si te sumerges y te atrapa, lo recordarás siempre con cariño: Una gran historia, grandes personajes, un sistema repetitivo pero a la vez bastante entretenido y una duración mas que decente, donde cada capítulo puede llevar diez horas perfectamente (también depende de lo que se pare cada uno a subir nivel o a investigar más a fondo todo) y el libro final ofrece varias historias alternativas dependiendo del orden que se use para recorrerlo. Sólo existe un orden correcto para usar los cinco personajes en ese libro y es el que nos llevará al final verdadero, otros órdenes que no sean ese llevarán a diferentes finales, así que para ver todo hay que probar diferentes cosas.

También nos ofrece la opción de Nuevo Juego+ para jugar con todo lo obtenido y diferentes modos de dificultad, en el que destaca el modo héroe, donde cualquier ataque te mata directamente, algo solo apto para super habilidosos con el mando (yo de la mitad de ese modo no pasé xD).

Por lo tanto y para acabar (espero no haber aburrido a nadie) os recomiendo encarecidamente este juego y que lo tengáis en cuenta para cuando salga en estos lares su remake. Os encontrareis todo lo que os acabo de contar, pero mejorado a tope con nuevos enemigos, nuevos objetos, nuevos escenarios y una mejor capacidad técnica gracias al potencial de las plataformas en las que sale y que hará que nada empañe la experiencia que, si ya era excelente hace varios años, lo será aún más, si cabe, en Leifdrasil.

¡Gracias por leerme y hasta la próxima!