Salón de la Fama - Candidato: The Legend of Dragoon

Vuelve, una vez más, una propuesta para nuestro Salón de la Fama, donde sólo pueden entrar RPGs que cumplen rigurosos criterios de crítica (superior a 90 puntos de media), público (superar los cinco millones de unidades vendidas) o bien entrar mediante voto popular, como es el caso que se busca decidir con esta propuesta.

El título que queremos presentar a vuestro juicio fue en su momento el proyecto más grande de Sony Japón y el último gran trabajo de Shuhei Yoshida, antes de pasar a direcciones ejecutivas para la compañía creadora de PlayStation: The Legend of Dragoon (PlayStation, 1999/2001).

Lanzado casi a la par de títulos de la franquicia que dominaba los RPGs en consola en esa época: Final Fantasy (en Japón coincidió con la octava entrega y en occidente con la novena), la crítica se cebó con él por su falta de originalidad o variedad, mientras que el público occidental fue su gran defensor, quedando aún así por debajo de los dos millones de unidades vendidas, con cerca del 75% de las mismas proveniente de nuestras regiones.

Vamos, que no cumple ninguno de los dos criterios para entrar de forma directa en nuestro Salón de la Fama y, por tanto, seréis vosotros los que decidiréis si esta obra se merece tal reconocimiento, si bien vamos a aprovechar la ocasión para tratar los aspectos del título, puesto que hasta el momento no lo habíamos hecho en Destino RPG.

En un mundo en el que los humanos reinan gracias a la victoria de sus caballeros ancestrales llamados Dragoon sobre la raza de los Alados, existe el llamado Monstruo Negro, una criatura que aparece cada 108 años sembrando la destrucción a su paso.

Nuestro protagonista, Dart, sufrió la pérdida de su familia ante esa criatura, que también arrasó su pueblo natal y, tras un periodo de cinco años tratando de encontrarlo, regresa a su pueblo de acogida, que ha sido arrasado por la facción de los Sandora, separada de Basil tras una cruenta guerra civil. Al descubrir que su amiga Shana ha sido capturada, Dart decide tomar partido en la lucha, descubriendo que guarda en su interior el poder de los Dragoon y viéndose involucrado en un conflicto mayor que implica al legendario espadachín Lloyd y varios artefactos legendarios.

Como podéis imaginar, la trama ocultará muchos secretos sobre el poder de los Dragoon, su lucha contra los Alados, el Monstruo Negro, los diferentes imperios y lo ocurrido en la antigüedad que está despertándose de nuevo en el periodo que cubre el título. Será una historia repartida en cuatro CDs, por lo que los acontecimientos se irán revelando poco a poco, llevando un ritmo que combinará momentos más pausados con otros realmente intensos.

Quizás una de sus pegas es que ese ritmo lento hace que, a veces, cueste seguir un poco la historia de lo que estamos haciendo en cada momento o que en determinadas circunstancias se pierda un poco la frescura u originalidad porque es una obra tardía de la "edad de oro de los JRPGs" y muchos jugadores llevaban un cierto bagaje de títulos, pero analizando todos los temas que toca, resulta una trama de las más interesantes de la época. 

The Legend of Dragoon es un JRPG de combate por turnos en el que se le añade un interesante factor de combos para nuestros ataques básicos, en el que pulsar el botón el botón de acción en cada momento del mismo nos permite seguir hasta completarlo, lo que supone aumentar mucho el daño causado. Cada personaje -menos uno- irá ganando variedad de combos, con más o menos complejidad, que el jugador podrá decidir usar antes del combate dependiendo su confianza en poder ejecutar de forma constante el mismo o de sus preferencias estratégicas, ya que unos irán más enfocados a hacer daño y otros a ganar puntos que nos sirvan para nuestras transformaciones.

Sí, porque eventualmente nuestros personajes podrán transformarse en Dragoon con los puntos ganados en nuestros combos, lo que les permite portar unas armaduras que, además de aumentar sus características de combate, ejecutar potentes ataques especiales con los que causar un daño masivo. Estas armaduras, no obstante, sólo se podrán portar durante un tiempo limitado, por lo que decidir el momento justo en el que usarlas será algo clave.

El sistema es sólido y exige concentración en el jugador en todo momento por su sistema de combos, invocaciones y el relativamente elevado ratio de encuentros aleatorios, que en algún momento llega a ser algo agobiante dado que "se pierde" mucho tiempo ejecutando cada combinación de ataques (especialmente los más complejos) y eso provoca que se pase mucho tiempo explorando cada escenario, sobre todo con la inclusión de una búsqueda de 40 polvos de dragón ocultos por todo el mundo que son necesarios para poder combatir contra el enemigo opcional más duro (e injusto) de todo el juego. Además, la muy limitada cantidad de objetos que podemos llevar, junto al elevado coste de los hechizos curativos, hacía que fuese necesario recurrir al comando Defensa, que curaba un 10% de la vida, alargando aun más algunos combates.

Fuera de combate, uno de los elementos que más chocó en su día es la inclusión de un mapa mundi que no era completamente libre, algo que tampoco era único para la época (Breath of Fire IV es otro gran ejemplo, aunque quizás mejor ejecutado) pero sí que chocaba con este apartado visual y le quitaba la libertad que ofrecían otros títulos. En Legend of Dragoon nos movíamos por líneas de puntos que unían las localizaciones y sufríamos combates aleatorios de mientras, lo que también mitigaba un poco la exploración o el factor sorpresa.

Con una duración que suele superar las 50 horas, el título resultaba un reto bastante bien equilibrado. Quizás en algunos momentos nos sintamos más fuertes de la cuenta, pero en general, si no nos paramos a entrenar en exceso, la dificultad será bastante correcta y muchos jefes nos podrán poner en serios aprietos, sin ser tampoco injustos... salvo cierto enemigo secreto que ya hemos comentado.

Quizás no tenga el renombre de los títulos de la serie Final Fantasy, pero tanto artística como técnicamente The Legend of Dragoon muestra un gran nivel. Visualmente se encuentra cercano a la octava entrega de la saga de Square, aunque con un estilo más medieval, donde destacan las espectaculares armaduras de nuestros Dragoon.

Con subtítulos en español, el juego llegó incluso doblado -sólo los vídeos, eso sí- a nuestro idioma, si bien esas pocas escenas demuestran que el nivel de las voces no fue precisamente el mejor, algo que no es tan relevante porque tampoco es un título que recurriese demasiado a las escenas de vídeo.

The Legend of Dragoon supuso una iteración continuista a una autentica generación de oro que llegó a PlayStation. El juego en sí no buscaba ser revolucionario, pero sí innovador, lo cual fue complicado en una generación donde recibimos tantos títulos de maravillosa factura y la serie Final Fantasy dominaba con mano de hierro.

Es uno de los eternos olvidados y, también uno de los más defendidos. De esa clase de títulos en los que todas sus variables configuran una obra realmente sólida que nos deja una buena trama (que quizás flaquea más en sus personajes), un interesante y original sistema de combate (que quizás se hace demasiado pesado), un buen apartado técnico para la época y quizás sólo "pinche" en el tema de la libertad o las misiones opcionales, que se reducen a ciertos combates opcionales y una búsqueda común en todo el mundo.

Personalmente, considero que sería un justo miembro a nuestro Salón de la Fama, pero esa es una respuesta que tenemos que decidir entre todos: ¿consideráis que The Legend of Dragoon es uno de los mejores RPGs? Indicadlo en los comentarios. Tenemos una semana para llegar a un veredicto.