[Análisis] Xenoblade Chronicles 2: Torna - The Golden Country
Ha pasado un año desde el lanzamiento de Xenoblade Chronicles 2, al que consideramos como el mejor RPG de Nintendo Switch lanzado en el 2017, pero el título ha seguido evolucionando durante todo este tiempo, con varios parches, mejoras técnicas o jugables, la opción de Nuevo Juego+ y nuevas incorporaciones (en Blades y vestuario) hasta llegar al lanzamiento de una expansión independiente, Torna: The Golden Country, disponible desde el pasado 14 de septiembre para los que adquiriesen el Season Pass o desde el 21 del mismo mes, para los que quisieran jugarlo a parte del título original.
Porque esta expansión tiene su propia personalidad incluso estando dentro del arco argumental (pasado) de Xenoblade Chronicles 2. En la misma podremos explorar un titán completamente nuevo y gigantesco, tendremos que acostumbrarnos a diferentes mecánicas de combate y conoceremos a personajes que no se habían presentado hasta el momento, además de añadir mucho trasfondo a otros particularmente importantes en el título original. Viviremos, pues, una historia que nos ayuda a comprender lo que ocurrió en el pasado de Alrest y que sería, por tanto, tanto un buen inicio para los que quieran jugar al maravilloso título de Monolith Soft por orden cronológico y también para los que ya lo disfrutaron en su día, pero quieran descubrir todo lo que dio pie a los acontecimientos del título original.
Aún así, ¿es suficiente lo que ofrece para que nos merezca la pena? Vamos a analizarlo:
Esta expansión comienza con una breve introducción al estado actual de Alrest, donde el Aegis Malos está sembrando la destrucción a su paso. Nuestros protagonistas serán Lora y su Blade, Jin, ambos escapando de las consecuencias de un lejano conflicto en el que la primera perdió a su madre. Poco a poco, los acontecimientos llevarán a ambos a tener que enfrentarse a Malos, para lo que nos uniremos a otros compañeros y sus blades.
La trama se centrará mucho en los lazos que unen a Blade y Driver, además de profundizar en las ansias de destrucción de Malos, su origen y los planes para intentar detenerlo. A pesar de conocer los acontecimientos que suceden tras esta historia en Xenoblade Chronicles 2, es posible llevarse más de una sorpresa con esta trama y muchas relaciones entre nuestros protagonistas serán realmente entrañables.
Curiosamente, esto provoca que en términos argumentales funcione muy adecuadamente tanto para los que ya conozcan lo que ocurren en Xenoblade Chronicles 2 (que ganarán trasfondo y sentirán mucho más cuando aparece algún personajes conocido) como para los que descubran el título desde la precuela, que entenderán mejor las acciones de muchos personajes cuando salten a la entrega original. Cumple realmente bien en este aspecto.
Torna: The Golden Country cambia varios elementos del sistema que conocíamos en el título original. Debido al gran tamaño de la región a explorar, los cambios en el Gormot son acordes al salto atrás en el tiempo que supone esta entrega. Menús e interfaz serán similares, pero elementos como la resonancia de Blades o la selección de misiones de mercenariado no aparecerán en este título. A cambio, podremos fabricar y mejorar nuestros objetos y encontraremos puntos de interacción entre personajes, como en Xenoblade Chronicles, lo que nos permitirá conocerlos mejor, profundizando en sus anhelos y preocupaciones.
En el apartado de combate las grandes diferencias estarán en la personalización de nuestros Drivers y Blades, ya que en este título podremos intercambiar el control entre ambos de forma veloz para realizar combinaciones, lo que vuelve a las batallas algo más ágiles. El sistema de evolución y personalización nos permitirá agregar daños o cambios de estado al intercambiar posición de combate durante nuestras combinaciones de golpes, lo cual resultará clave en los combates más complicados y permite despliegues de efectos realmente llamativos. La variedad de combinaciones es realmente amplia, no llega al nivel de variedad de la entrega original( Más de cuarenta Blades disponibles ), pero la profundidad de personalización para los disponibles en esta entrega es superior.
Con una duración que ronda las 20 horas dependiendo de la cantidad de contenido que exploremos, el título puede extenderse mucho más si aprovechamos el Nuevo Juego+. Lamentablemente, buena parte de la duración del juego está provocada por la necesidad de completar misiones secundarias para obtener la suficiente experiencia y equipo con los que poder afrontar algunas partes de trama principal. Muchas resultan interesantes, ofreciendo momentos realmente memorables, pero tener la obligación de cumplirlas para mejorar lo suficiente y no ser aniquilados si queremos seguir con la historia primordial, esto es, sin duda, lo más molesto de la dificultad del título: hace falta farmear para poder completar el juego.
Tomando como base el motor gráfico del título original, Torna ofrece mejoras en el renderizado de luces, sombras y enfoque de los objetos, lo que deja un resultado realmente sólido. Tanto las escenas de combate como los momentos pausados de pura conversación lucen a un buen nivel, teniendo especial cuidado en muchos momentos para que el efecto resulte todavía más impactante de lo que sucedía en Xenoblade Chronicles 2. Se nota que es una entrega más corta y han podido perfeccionar y pulir al detalles cada escena.
Musicalmente, esta expansión añade nuevas melodías a las muchas que ya estaban disponibles en el título original, completando una combinación realmente armoniosa que tiene nuevas piezas realmente sublimes, manteniendo el nivel del excelente trabajo que realizó el equipo que lidera Yasunori Mitsuda.
Xenoblade Chronicles 2: Torna - The Golden Country es una expansión absolutamente recomendable si disfrutaste de Xenoblade Chronicles 2 y te quedaste con ganas de más. Tanto su construcción argumental como las novedades jugables lo hacen un complemento perfecto que solidifica aún más a los personajes menos conocidos del título original.
Si quieres usar este título como entrada en la saga también resulta particularmente sólido, ya que al tratarse de una precuela funciona muy bien por sí mismo y permite descubrir lo que os espera en el título original, todavía más amplio. Quizás no tenga tanto impacto para vosotros en caso de no saber como acaba todo, pero este punto de vista os puede hacer disfrutar de una forma especial Xenoblade Chronicles 2 porque, creednos, si disfrutáis de este título os lanzaréis de cabeza por el mismo.
¿Ya habéis jugado a esta expansión? ¿Qué os pareció? En caso contrario, ¿preferirías probar antes esta precuela o pensáis que es mejor comenzar con el juego original?
He disfrutado bastante esta expansión, se hace liviana, no como el juego principal. La implementación de poder alternar entre Blade y Piloto y otros ajustes (poder encadenar los especiales sean del elemento que sean) mejoran la experiencia de juego. Es una gozada jugar con Minnoth, por ejemplo.
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