[Análisis] Mary Skelter 2

Mary Skelter: Nightmares fue una de las mayores sorpresas desarrolladas por Idea Factory, la compañía de los Neptunia, al aprovechar de forma interesante el salto a un subgénero como el de los Dungeon Crawlers, generalmente más arcaico. Porque si con RPGs de combate por turnos o acción sus otros proyectos podían caer en resultar algo repetitivos o simples, en los Dungeon Crawlers eso es mucho más habitual, camuflando perfectamente una cierta rémora como desarrolladores.

De hecho, otras tendencias habituales de la compañía, como una base en forma de menú y eventos entre sus personajes con muchos tropos del manganime, incluyendo varias escenas claramente picantes, funcionan mucho mejor en juegos de este tipo, con una trama que destaca sobre otros juegos de la competencia, salvo algún que otro Shin Megami Tensei. Por todo ello, no sorprende que se desarrollasen nuevas entregas bajo este concepto, como este Mary Skelter 2 que se lanzó en Switch en el 2019 y que llegó a PC la pasada semana. Este título, además, sorprende por dos decisiones realmente llamativas: primero, no se trata de una secuela, sino una especie de reinicio de los sucesos que vivimos en Nightmares con un desarrollo diferente y segundo, por la inclusión del remake del título original dentro de la propia secuela, haciéndola de facto un 2x1 que garantizan cerca de cien horas de juego si queremos completarlos ambos. ¿Pero qué es lo que ofrece este título en sí, más allá de sus aspectos generales? Vamos a analizarlo:

El título nos lleva a un Tokio arrasado y convertido en una estrambótica prisión viva plagada de monstruos llamados marchens, que torturan o asesinan a los pocos humanos que sobreviven en ese entorno. Las únicas que pueden combatir contra los mismos son las llamadas Blood Maidens (doncellas de la sangre), referencias de cuentos infantiles y que reaccionan a la sangre de estas criaturas, haciéndose más fuertes. Nuestra trama comienza con Otsuu, Little Mermaid (Sirenita) y Red Riding Hood (Caperucita roja) buscando nuevas Blood Maidens entre las cárceles de los marchens, encontrando a Alice y Jack. No obstante, tras el ataque de una Nightmare (Pesadilla), los grandes e indestructibles monstruos de la torre, el grupo se separa y Jack, malherido, acaba convertido en un monstruo bondadoso atado espiritualmente a Otsuu, descubriendo además la relación de su sangre con la cura al estado de corrupción que las doncellas pueden sufrir: el modo skelter.

Así las cosas, deberemos comenzar un nuevo asentamiento con los pocos humanos que han sobrevivido a los monstruos y tratar de encontrar al resto de Blood Maidens, visitando diferentes mazmorras de la prisión para encontrar nuevos -o conocidos pero perdidos- miembros que nos permitan avanzar por nuevas zonas con sus poderes y, eventualmente, tratar de escapar de la prisión. El título se desarrolla, de esta forma, con un sistema de capítulos atados a las diferentes mazmorras disponibles, con diferentes eventos que suelen tener un desarrollo similar: encontrar una nueva doncella, liberarla de su estado (normalmente skelter, otras veces problemas mentales por sucesos previos) y acabar con el jefe de la mazmorra, todas juntas, demostrando la fortaleza del grupo.

Entre capítulos también tendremos muchas escenas dentro de nuestra base, a veces desarrollando al trama pero otras, simplemente, profundizando en las personalidades de las doncellas o los miembros humanos de la misma. Prácticamente todos los personajes seguirán tropos muy conocidos del manganime (Otsuu y Sirenita serán la pareja protectora pero tímida, Hamelín se creerá una heroína de cuento, Gretel será fría y calculadora, Pulgarcita una pura tsundere...) combinados con algunos detalles característicos de sus propios cuentos y detalles propios de la trama del juego, como relaciones de hermandad entre algunas y, sobre todo, algún que otro momento erótico-festivo ligero característico de Idea Factory. En la versión de PC algunas de esas escenas se han maquillado un poco más para evitar una calificación por edades excesivamente alta, aunque tampoco es que se fuese a ver nada muy salido de tono en cualquier versión. Todos sabemos los límites que hay que respetar para lanzar un videojuego en consolas y la existencia de más o menos humo para cubrir los pechos de los personajes no debería ser excesivamente relevante cuando es una parte ínfima de la duración de los juegos.

Con todo, hay que decir que el desarrollo argumental del título y sus personajes es un poco lento, repetitivo y poco interesante, más allá de unas cuantas bromas o situaciones que nos pueden hacer más gracia en algún momento... pero tiene un episodio final realmente brillante, cuando por fin se deciden a desarrollar argumentalmente la situación de la torre, los objetivos del juego y trata de explicar muchos elementos de la trama. Quizás se deba un poco al contraste con todo lo anterior o que logren que nos encariñemos con cada personaje previamente, haciendo la conclusión mucho más impactante, pero un final verdadero que sólo es accesible tras responder correctamente a varias cuestiones y que llega a conectar todos los puntos argumentales de la trama que habían quedado completamente sueltos es realmente llamativo. Eso sí, ver todo el argumento global puede suponer un empacho de mazmorras y mamarrachadas intermedias que igual se hacen demasiada bola para ciertos jugadores.

El desarrollo de Mary Skelter 2 es el de un Dungeon Crawler básico: exploración de mazmorras en primera persona con un mapa que se actualiza con el suelo que hayamos recorrido (incentivando pasos ineficientes por cada una de las casillas que compongan cada habitación, por ejemplo) y un sistema de encuentros aleatorios que no es demasiado duro pero sí que se puede hacer algo pesado cuando simplemente queremos explorar o regresar al piso donde estábamos. A pesar de esta base reconocible, este título tiene muchos elementos propios diferenciales, destacando especialmente unas mazmorras muy brillantes y plagadas de trampas, como agujeros, pinchos que salen del suelo, estatuas que nos golpean si no pasamos rápido por ellas, cadenas sobre las que caminar manteniendo el equilibrio con nuestro stick...

Esta exploración tan particular se incentiva con un sistema de llaves y palancas que encontrar para ir abriendo caminos para avanzar o atajos que alivien la cantidad de pasos necesarios para poder llegar al siguiente nivel, en mazmorras que tendrán de dos a cinco niveles habitualmente, muchos de ellos realmente amplios y creando problemas de navegación básica porque el minimapa completo no se puede escalar lo suficiente sin sobreponerlo sobre la propia pantalla donde nos movemos en primera persona, lo que complica la visibilidad en entornos donde no faltan trampas que pueden quitar entre una décima parte y la mitad de salud de todo el grupo si nos las comemos. Otro elemento incomprensible es que el título ofrece un elemento muy interesante en el que cada nueva Blood Maiden ofrecerá una habilidad de exploración clave para avanzar por muchos sitios: Otsuu creará esferas para cubrir agujeros o pulsar botones, Hameln abrirá puertas gigantes, Gretel lanzará pan dos casillas hacia delante y nos transportará al mismo para saltar agujeros, Rapunzel usará su pelo para abrir cofres lejanos o pulsar interruptores... un sistema de navegación realmente interesante y original que, por alguna razón que no tiene explicación coherente, supondrá usar SP para usarlas, llegando a provocar que tengamos que usar objetos de recuperación sólo para seguir explorando las mazmorras y que nos pueden dejar sin SP para ejecutar nuestras habilidades en combate.

El combate se desarrollará por turnos, con una barra superior que nos indicará el momento de actuación de cada participante. Nuestro grupo podrá incluir hasta seis miembros al mismo tiempo, con el resto de doncellas actuando como accesorias ofreciendo beneficios activados al azar con la compañera elegida (por ejemplo, podrán causar veneno al golpear, recuperar SP...), las cuales también podrán colocarse al frente o retaguardia para recibir más o menos ataques y daño. Tendremos gran variedad de equipo disponible (si bien hay muchas piezas especializadas para ciertos oficios) y un sistema de trabajos intercambiables para cada doncella, que podrá desbloquear hasta cinco opciones diferentes. Las habilidades (pasivas o activas) activadas usando puntos que ganamos al subir de nivel y que podemos asignar en un espacio que se puede expandir usando la sangre que logramos de enemigos serán accesibles para ese personaje en todo momento, aunque en algunos casos resulta algo irregular por el hecho de que muchas están mal explicadas, tienen un coste prohibitivo hasta muchos niveles más adelante o encontramos trabajos que parecen contravenir todas las otras opciones de ese personaje.

Otro factor relevante de las batallas será que los enemigos suelen resultar bastante resistentes, numerosos o extremadamente molestos, haciendo que muchos encuentros nos puedan llevar más de diez minutos porque no queremos vaciar nuestras reservas de SP demasiado rápido, incluyendo enemigos que pueden golpear a todo el grupo de forma constante ya desde la segunda mazmorra, hay veces que ciertos monstruos atacan dos veces por turno sin ninguna razón aparente (pueden hacerlo de forma aleatoria), otros que no paran de intentar causar estados alterados... lo clásico de este subgénero que puede desesperar a los jugadores menos habituados al mismo y es básicamente, lo que buscan los que están enamorados de estos juegos. Por fortuna, el título ofrece un sistema de dificultad gradual (Fácil/Normal/Difícil) que puede ayudar a que se adapte mejor a todo el mundo.

Otro elemento importante del juego es el factor de la sangre de los enemigos golpeando a nuestras doncellas al recibir daño, causar críticos o derrotando monstruos, que tendrá diferentes aplicaciones en combate: por una parte, una doncella podrá chupar la sangre en el cuerpo de otra para provocar un efecto especial asociado a la misma (anular el próximo daño, subir estadísticas, curar...) o bien podremos dejar que se rellene el indicativo para que la usuaria entre en estado Masacre, aumentando sus estadísticas y teniendo acceso a habilidades exclusivas tremendamente potentes. No obstante, las doncellas también se irán corrompiendo y, si entran en Masacre con la corrupción activa, pasarán al estado Skelter, perdiendo el control de las mismas, que empezarán a golpear al azar a los enemigos o compañeros con las estadísticas todavía más disparadas. Esto hace que la gestión de la sangre tenga un papel muy importante entre batallas, decidiendo cuándo queremos chupar a una compañera para ganar un efecto inmediato, entrar en Masacre o bien probar a la ruleta del estado Skelter, que normalmente sale mal pero hay veces que nos puede permitir ganar combates de forma milagrosa.

En todo ello será muy importante el papel de Otsuu y Jack, que lucharán juntos y podremos decidir cómo gestionar sus dos turnos: nuestra doncella podrá tener dos actuaciones para atacar, usar habilidades u objetos (es el único personaje que tendrá acceso a los mismos sin pasar por un oficio concreto, lo cual le hace extremadamente vital para la supervivencia del grupo), pero también podremos usar uno o dos turnos con Jack, quien podrá limpiar la corrupción de otras doncellas (y permitir que entren en Masacre en lugar de Skelter), purgar o causar estados alterados exclusivos frente a los enemigos, algo que afectará a su cordura (que también podremos mejorar usando un turno para respirar o darle abrazos con otras doncellas) y que, si explotamos demasiado, le llevará a entrar en Nightmare Jack, su propia versión de Skelter con resultados similares. También será posible limpiar la corrupción de nuestras doncellas en la base para ganar bonificaciones, si bien en la versión de PC se eliminó inicialmente el minijuego con altas connotaciones sexuales en el que debíamos frotar el cuerpo desnudo de nuestras doncellas para limpiarlas mientras ellas soltaban gemidos, pero finalmente se cedió a la presión y está incluída.

El título incluye también otros elementos como un sistema de regalos y decoración de las habitaciones de cada doncella que no da para mucho (simplemente es un intercambio de regalos, ya que no hay un medidor relevante de afinidad o algo por el estilo); un sistema de misiones bastante irregular que se debate entre tareas simples y otras extremadamente pesadas como localizar y matar monstruos muy raros; podremos mejorar las estadísticas de nuestro equipo usando sangre; plantar sangre para generar equipo aleatorio con habilidades especiales en cada mazmorra... muchas opciones que no están excesivamente bien explicadas y en las que no resultará fácil determinar dónde realizar nuestra inversión de recursos o bajo qué condiciones vale más o menos la pena.

Al final, nos queda un título que puede superar fácilmente las cincuenta horas de duración, cerca de cien si completamos ambas aventuras con la inclusión del remake de Nightmares dentro del paquete. La exploraciónd e las mazmorras con las trampas y habilidades de nuestras doncellas es interesante y original, el combate y la dificultad son lo habitual en juegos de este estilo y, quizás, de los aspectos más criticables serían la falta de adecuada información o una mejor explicación de las diferentes opciones del juego, que resulta bastante irregular y ejemplifica muy bien la diferencia entre los que entienden mejor y peor todas sus mecánicas, pero en general debería ser muy del gusto de los aficionados a los Dungeon Crawlers.

El nivel visual del juego se mueve entre unos diseños sugerentes para las Blood Maidens, que reflejan los cambios de vestuario de cada oficio y unos enemigos diseñados en 3D, que son bastante aleatorios y abusan a nivel absurdo del cambio de color, hasta el punto que cada piso puede tener sólo unos cinco o seis enemigos diferentes y, el siguiente, tener básicamente la misma cantidad pero con los mismos enemigos en otro color. La diferencia entre los mismos es, además, bastante testimonial y las animaciones de batalla, en golpes o habilidades, es muy básica. El diseño de escenarios destaca exclusivamente por el juego para las habilidades de las doncellas, porque la inconveniencia de un minimapa que no puede mostrar toda la zona y unos entornos algo confusos hace que el paquete visual sea bastante irregular, aunque tampoco es raro en este subgénero y podríamos considerarlo a la par de la competencia en este aspecto. Las pocas escenas a pantalla completa, dibujadas de forma sugerentes y que normalmente incluyen momentos sexuales o sangrientos, son tan buenas que duele que no aparezcan en más momentos del juego, que tienen que ser excesivamente descriptivos textualmente para que el jugador pueda comprender qué demonios está pasando en muchas escenas de acción.

En el apartado musical el juego tiene algunos temas correctos y reconocibles, pero se ven lastrados en el medio plazo, donde se nota el bucle de ciertas canciones y el peso de la repetitividad en mazmorras muy extensas se hace notable. El doblaje, en inglés o japonés, resulta bastante bueno, aunque quizás también algo incómodo si no os gustan demasiado los gemidos de las doncellas en diferentes momentos. Con textos en inglés, la versión de PC también llega con algunos problemas técnicos de reescalado, incompatibilidades o ciertos errores sueltos. En nuestro caso, sólo lo primero nos ha resultado evidente y el juego sólo nos tiró de la partida una vez en más de cincuenta horas, lo cual indica que si no tenéis problemas de base debe rendir adecuadamente. Eventualmente, la idea es que todos estos inconvenientes sean solucionados en pocos días, así que no debería ser un problema importante al medio plazo. Además, el título ofrece todos los DLCs de contenido y, evidentemente, el remaster del juego original, lo cual es siempre de agradecer.

Mary Skelter 2 es un RPG ideal para los aficionados a los Dungeon Crawlers, por sus interesantes novedades a las mecánicas clásicas del subgénero como la exploración en base a habilidades o la gestión de las trampas del escenario y los muchos elementos accesorios (aunque mal explicados y calibrados) de sistema de trabajos, evolución libre de habilidades, mejora de equipo, plantaciones de sangre, el sistema Masacre y Skelter... Argumentalmente es cierto que se puede hacer algo repetitivo y muy centrado en tropos clásicos del anime en muchos casos, pero ya con eso supera a otros juegos del estilo y las revelaciones finales son una auténtica sorpresa con respecto a todas las consideraciones previas.

Evidentemente, si no soportáis los Dungeon Crawlers o las connotaciones sexuales de un grupo protagonista sólo con jovencitas este juego no será para vosotros, pero si no os importa esa clase de contenido y tenéis ganas de muchas horas de farmeo, exploración y combate, este juego las garantiza con este paquete de dos entregas en una. Ciertamente, de lo mejor de este subgénero actualmente, incluso con sus problemas.

Mary Skelter 2 está disponible en Switch y en PC, versión usada para este análisis, que ha sido posible gracias a una copia ofrecida por Ghostlight.