Análisis de The Last Story (Por la crítica)

The Last Story supone la vuelta de Mistwalker al plano creativo y, con ellos, que Hironobu Sakaguchi y Nobuo Uematsu (Creador y compositor de la saga Final Fantasy hasta Final Fantasy X, respectivamente) se vuelvan a unir con Nintendo para crear un JRPG.

Este título, que ha llegado en un perfecto español, se ha encontrado con varios problemas con la crítica: El primero, que ser lanzado en Wii provoca un apartado gráfico inferior al de consolas como PS3 y Xbox 360, algo que muchos análisis no han perdonado. El segundo, que ha salido solo en Europa y Japón, lo cual hace que el número de análisis sea bajo (Solo 23) y totalmente dependiente de la prensa especializada europea, tradicionalmente muy crítica con este género y, a veces, en aspectos que no son criticados en otros juegos más populares.

Sea como sea, The Last Story está teniendo generalmente una crítica positiva. ¿Queréis saber qué es lo que se ha comentado del mismo? Vamos a repasarlo:


Sistema de combate


En The Last Story los combates combinan elementos tácticos (Como una pausa para analizar al grupo enemigo antes de la batalla, posibilidad de atacar por sorpresa y/o usar elementos del escenario para tomar ventaja) con un estilo enfocado a la acción, como se suele hacer en los RPGs occidentales. Aunque solo controlamos a Zael, el protagonista de la historia, la labor de nuestro grupo, que toma decisiones propias, resultará vital, si bien nuestra labor tendrá un peso mucho mayor que la de otros JRPGs.

Zael es el único que puede usar el magnetismo, una habilidad que le permite llamar la atención de los enemigos, algo básico para permitir que nuestros magos puedan tomarse tiempo para realizar sus conjuros. Además, con esa habilidad también tendremos que llevar un peso curativo (Podemos resucitar a los aliados caídos al acercarnos a ellos), podremos aprovecharla para expandir/difuminar los círculos mágicos de nuestros aliados o enemigos (Algo esencial) y, en medio del furor del combate, nos permitirá parar el tiempo parar dar órdenes concretas a todos los miembros de nuestro grupo, que podrán ejecutar directamente.

Si a esto le unimos un brillante sistema de equipo, que podemos evolucionar con dinero y objetos o cambiarle de color con tintes, unos personajes muy variados y unos enemigos que nos obligan a buscar la estrategia correcta en cada situación, completamos un sistema que toda la crítica ha alabado, llegando a ser incluso el mejor aliciente del juego.

Originalidad

Uno de los principales problemas de The Last Story para la crítica. Como buen JRPG, recurre a una historia fantástica, con tintes políticos, una gran importancia de la amistad y un héroe que crece con la aventura.

Muchos análisis han comentado que la reiteración de clichés hace que esta historia resulte previsible en muchos momentos. El grupo de personajes resulta, a veces, poco interesante individualmente, ya que gran parte de sus miedos, inspiraciones o comportamientos recuerdan una y otra vez a algo ya vivido en otros títulos del género.

Historia


Un protagonista, Zael, que queda huérfano en la guerra y se tiene que buscar la vida como mercenario junto a su amigo Dagran y su grupo, formado por personajes tan variopintos como el áspero mago Yurick, la alcohólica Syrenne, el eterno ligón Lowell y Mirania, una mujer de pocas palabras. El sueño de Zael y Dagran es convertirse en caballeros del reino, de forma que puedan vivir de forma más estable y honorable que ofreciendo sus servicios al mejor postor.

Todo cambia un día en el que Zael recibe la “bendición” de la Errante, lo que le permite aceder a sus poderes de magnetismo. Esto hará que el grupo gane importancia y se vea envuelto en las conjuras políticas de la guerra entre Isla Lázulis y los Gurak, una batalla que pondrá en peligro todo el mundo que conocemos.

Toda la historia se centra en Lázulis, su ciudad y barcos, islas o mazmorras que la rodean. La mayor parte del tiempo estaremos paseando por las pobladas calles de la ciudad, representada vivamente por sus ocupados habitantes, que nos ofrecerán misiones opcionales, nos venderán/comprarán objetos (Siendo el comercio una de las principales fuentes de ganar dinero: Comprar barato y vender cuando ese objeto esté caro resultará terriblemente lucrativo) e incluso podremos participar en las batallas del Coliseo para ganar experiencia y premios extra.

En las conversaciones, la posibilidad de escoger entre dos respuestas, permitirá todo tipo de situaciones, algunas cómicas y otras más serias, que nos permitirán comprobar el desarrollo de los personajes.

El ordenamiento en capítulos resulta muy adecuado y la gran cantidad de escenas no cansa al jugador, algo que es muy de agradecer. Como ya comentamos en el apartado de originalidad, la crítica se ha centrado en la ausencia del factor sorpresa, sobre todo si has jugado a muchos RPGs, pero en términos generales el desarrollo parece el correcto.

Por cierto, vuelvo a recordar a los lectores despistados que todo está traducido a un perfecto español, por si en algunas escenas o videos veis imágenes en inglés. Esto solo es debido a que han sido l@s más representativ@s que he encontrado.

Música y sonido


 Tener a Uematsu encargado de tu banda sonora es sinónimo de calidad. The Last Story combina a la perfección temas suaves con otros más intensos en momentos de tensión y otros épicos e inolvidables. Lo único que se puede criticar (Y, de hecho, solo los análisis más ácidos han hecho) es la cierta falta de variedad en algunos momentos.

En cuanto a las voces, la localización de Nintendo ha resultado casi perfecta en este apartado. Están en inglés, sí, pero resultan tan brillantes y adecuadas para cada personaje que resulta casi imposible ponerle un pero.

Gráficos


 Si consideramos que este juego ha sido lanzado en Wii, el apartado gráfico de este título resulta de lo más adecuado, ya que solo presenta ciertos problemas en la intensidad del combate. Quizás no llegue a los límites visuales de títulos como The Legend of Zelda o no resulte tan amplio y colorido como Xenoblade Chronicles, pero todos los personajes están muy bien representados, permitiendo la personalización por parte del jugador, los escenarios son correctos y ciertas escenas nos muestran lo mejor que puede ofrecer esta consola en este apartado.

Eso sí, cuando se compara el aspecto visual de The Last Story con el de juegos de consolas con capacidades técnicas superiores, evidentemente tenemos un juego inferior.

Dificultad

Quizás una de las pegas del juego consista en este apartado. The Last Story no resulta un juego fácil, ni mucho menos, pero al tener que explicar todos los conceptos del juego en las primeras horas y permitir que el jugador repita combates opcionales simples para ganar experiencia, objetos o dinero, nos encontramos con que la superioridad de nuestro grupo sea demasiado para los voluntariosos enemigos y, aunque hay varios combates que pueden suponer todo un reto, en términos generales no hubiera venido mal más combates especialmente duros con los que explotar aún más el gran sistema de combate.

Bueno, por fortuna, tenemos al modo multijugador online (Competitivo o cooperativo) para explorar esa posibilidad.

Duración

 (La calidad deja que desear)

Entre 20 y 25 horas de duración no es mucho para un JRPG, pero son las necesarias para evitar caer en demasiada repetitividad o en aspectos secundarios que no llevan a nada.

Esta baja duración es compensada por la posibilidad de Nuevo Juego+ y, sobre todo, por el ya comentado modo multijugador online. Podemos enfrascarnos en combates contra los jefes del juego en un grupo junto a otros 5 jugadores, podemos combatir contra otros jugadores en un 6 contra 6 o, en grupos, 3 contra 3, algo que permite disfrutar aún más del sistema de juego.

Explorar ese sistema nos dará acceso a nuevas skins y posibilidades de personalización, además de disfrutar de usar objetos como trampas o venenos para provocar el caos en grupos enemigos mal coordinados, lo cual es siempre un gran aliciente. Eso sí, las posibilidades de Wii en este apartado son las que son, así que tampoco estará exento de fallos y problemas puntuales.

En resumen

The Last Story es un gran JRPG que combina un brillante e innovador sistema de combate con un apartado visual correcto para Wii, una banda sonora de ensueño y una historia algo corta o lineal que, igual, puede hacérsele típica a ciertos jugadores.

Teniendo en cuenta las otras posibilidades en Wii, estamos ante uno de los tres mejores juegos en este género para la consola e incluso podríamos estar ante uno de los mejores JRPGs del año. Las posibilidades multijugador añaden un punto extra de originalidad y diversión/duración con la que los jugadores puedan disfrutar largo y tendido de la última joya del creador de la saga Final Fantasy.

1 comentario:

  1. La verdad que al empezar este juego me parecio horrible! jajaja Cuesta acostumbrarse al sistema de batalla, pero dandole una segunda oportunidad... me esta pareciendo un juego de lo mas bueno! aunque acabo de empezar... Jeje la ciudad es preciosa!

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