Los plataformas de nuestra vida
¡Buenas! Esta es una entrada de Saifogeo que quiere dedicar al género de las plataformas, otro que ha ido evolucionando muchísimo con el paso de los años y que nos ha llevado a otros géneros totalmente distintos hoy en día. Pero aquí estoy yo, Adell, para "ponerme metafísico" y realizar una pequeña introducción sobre este género.
Desde aquel primer Donkey Kong en el que, curiosamente, controlábamos a Mario, saltando los barriles que nos arrojaba, el género de las plataformas ha ido evolucionando casi a la par que la propia técnica... aunque, al igual que los RPGs, tampoco hacen falta muchos efectos visuales para este tipo de juegos. En la mayoría, podríamos simplificar al máximo posible su nivel gráfico y seguiría siendo el mismo juego, igual de divertido.
Sin embargo, de estos plataformas vinieron los "juegos de acción donde te podías caer", que empezaron títulos como Castlevania, pero podríamos llegar a Uncharted, pasando por Jak & Daxter, Ratchet & Clank o Tomb Raider. Este género nos hizo pensar, con The Boy and his Blob, Abe's Oddysee, LittleBigPlanet, Braid... O en los saltos más complejos de Super Meat Boy, Prince of Persia, la búsqueda de los secretos de Kirby, Wario, Donkey Kong Country, Mario... Sentimos la velocidad con Sonic incluso más que con los juegos de carreras, muchos nos enamoramos del carisma de sus protagonistas, como Banjo y Kazooie, Klonoa, Raz, Bubsy, Spyro, Faith, Rayman, Shantae...
Incluso cuando parecía que estaba en declive, este género siempre estaba ahí, está y estará, porque este género es una de las bases de los videojuegos y porque es divertido moverse por escenarios con cosas que te quieren matar, teniendo la precisión perfecta para ejecutar cada movimiento.
Por todo ello, Sai nos va a contar su experiencia, pero también queremos conocer la vuestra ya que, al fin y al cabo, incluso siendo fans de los RPGs, si nos gustan los videojuegos, casi por definición nos gustarán los plataformas y habremos jugado a varios en nuestra vida. Así, pues, os dejo con ella y os emplazo a los comentarios para que compartamos cuáles son algunos de estos plataformas que nos han marcado. ;)
Buenas a todos de nuevo, seguidores de Destino RPG, este mes parece que estoy más elocuente de lo normal, o tal vez sea sólo que las últimas noticias me hacen recordar mi infancia y sacan mi vena más nostálgica, ¿quien sabe?
En la actualidad, la mayoría de los juegos a los que dedico mi tiempo son RPGs o sucedáneos de estos, es decir, aquellos que cuentan con personajes a los que subir estadísticas o con una historia bastante elaborada de un modo u otro. Pero antaño, cuando la pequeña Sai no distinguía de géneros, sólo de juegos, aquello a lo que más le dedicaba mi tiempo era a los plataformas.
Ya os comenté una vez en una entrada colaborativa que uno de mis primeros títulos fue Castle of Illusion: Starring Mickey Mouse, juego de estilo 2D en el que avanzábamos por escenarios la mar de variados.
Tras ese, llegaron muchos más: los distintos Sonic, en los que peleaba por manejar a la monería que era Tails, Alex Kidd, los Super Mario o Donkey Kong de Game Boy... muchos títulos que compartían estética en dos dimensiones, más o menos coloridas.
El gran salto, sin embargo, se dio con la llegada de las consolas de sobremesa "potentes", que aunque aún contaban con títulos de este estilo (como los que llegaron de la franquicia Disney, tipo Hércules, Tarzán o Mickey's Wild Adventure), empezaban a apostar por entornos con modelados 3D. Un ejemplo de ello, y que muchos recordarán como un gran juego que marcaría el inicio sería Mario 64, donde veíamos un Mario recorrer entornos de lo más variados, que podíamos recorrer también hacia el fondo.
Más adelante, llegarían muchos más que también serían de lo más entretenidos: los archiconocidos títulos de la saga Crash, los Spyro, Banjo-Kazooie, u otros que, pese a ser buenos, no tuvieron tanta repercusión, como los Croc o Gexx.
Pero, ¿Qué tenían estos títulos para enganchar tanto en esa época? La respuesta al menos para mí es sencilla: nos planteaban mundos llenos de colorido, con fases diferentes entre sí en los que había que actuar de maneras muy diferente, ser precisos. Tenían elementos de recolección, protagonistas humanoides o caricaturizados, zonas de deporte con carreras... es decir, que salvo por sus tramas, que suelen ser bastante simples, nos encontrábamos ante títulos la mar de completos, que podían ayudar a acercarse incluso a los que nunca habían tocado una consola. De hecho, en casa los jugaba con mi madre y ella incluso se los pasaba antes que yo.
Eran juegos a los que les podías dedicar muchas horas (excepto si eres senpai Adell), que llevaban a la rejugabilidad y a jugar en compañía, sí, aunque fueran títulos de un solo jugador. Sin embargo, pese a lo completo de estos títulos, este género ha dado una sensación de ir decayendo, principalmente por la relativa poca innovación de su serie principal (Super Mario Bros.) y porque sus dos grandes rivales, Crash Bandicoot y Sonic, habían "caído en desgracia".
Sin embargo, como ha contado Adell, este género siempre ha estado ahí, con joyas como los Jak, los Sonic Adventure o Ratchet & Clank, por poner algunos ejemplos de títulos que me han acompañado todos estos años y que todavía disfruto, porque a pocos plataformas se les nota la edad.
Será el cambio de generación, o de gustos del consumidor pero, habiendo disfrutado tanto de estos títulos, es triste ver como ya no parecen tener ese aura de "juegos básicos para un buen catálogo" y que los únicos que apuesten por ellos sea Nintendo con sus Mario o Activision con los Skylanders. Menos mal que hemos tenido también un resurgir con los títulos indie, con Super Meat Boy, Limbo, Spelunky, I Wanna Be The Guy... Aunque en este caso ofrecen sus aventuras en formato 2D.
Mencionando nuevamente a Skylanders aunque, a modo personal, no me guste el diseño de los personajes, lo cierto es que se acercan bastante a esta sensación que mostraban los antiguos plataformas en 3D, quizás con un exceso de fijación en la acción, pero muy parecido y eso de ver a niños acompañados con sus padres comprando una figura para poder usarla en su juego me parece de las cosas más tiernas.
¿No os gustaría ver más títulos como estos, que enamoren y junten a distintas generaciones? Quizás peque un poco de "nostalfag", pero esta convergencia pienso sería la mar de acertada y parece que se está perdiendo ante el espectáculo visual y los grandes juegos de acción.
Como ya comenté en una entrada hace tiempo, los plataformas fueron mi origen en los videojuegos (como el de muchos) y lo que más jugaba antes de meterme de lleno en los RPG. Mi saga favorita siempre fue Sonic (lástima que desde los Adventure, sólo rescato Generations y, parcialmente, colours), aunque hay otras que me gustan mucho como Crash. Por mencionar alguno menos conocido, quiero nombrar a Pugsy (megadrive), uno de los primeros plataformas con elementos de puzzle que te hacían pensar.
ResponderEliminarRecientemente es un género al que juego poco, pero de tanto en tanto alguno pruebo, como los shantae, freedom planet o Sonic (de hecho, estoy con lost world, aunque deja algo que desear).
Y concuerdo en que es un género que no nota el paso del tiempo tanto, a veces tiro de emulador y me paso alguno XD Hace unos meses me pasé Bubsy, el cual nunca fui capaz de niño (es jodidamente difícil el final).
La verdad, apenas toqué las plataformas, y siempre para pasar el rato con amigos. Nunca fue un género que me interesara mucho (ni en el que fuera decente, todo lo contrario) xD. La excepción vino con el primer Shantae, que descubrí hace un par de años y me enganchó.
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