[Análisis] Pokémon Perla Reluciente/Diamante Brillante

Pokémon es una franquicia que no necesita presentación, ya que lleva años siendo una de las series de videojuegos más fáciles de reconocer y de las que mayores ventas puede presumir a nivel mundial. Esto es algo que se ha ido consolidando durante los años y, si bien ha tenido altibajos en algún spin-off, los juegos de la saga principal pueden presumir de no padecer nunca por falta de ventas.

La saga nunca se ha acobardado a la hora de revisar sus entregas originales con eventuales remakes, aunque quizás en este caso tenemos una importante variación con respecto a la fórmula conocida ya que, no es Game Freak la encargada del desarrollo de esta revisión, sino ILCA, dándole al estudio principal la tranquilidad para trabajar en una entrega diferente como será Leyendas Pokémon: Arceus. Este movimiento ha supuesto, además, que el remake de la cuarta generación de la franquicia, en plena celebración de su 25 aniversario, se realice con importantes novedades tanto visuales como en varios aspectos jugables de la serie, lo que ha generado todavía más presión al trabajo de este título.

Lanzado el pasado mes, este Pokémon Edición Perla Reluciente/Diamante Brillante trata de actualizar un juego lanzado hace 15 años en Nintendo DS, un juego que resulta especialmente importante para la comunidad de jugadores que ronda la veintena porque les transporta a su niñez más consciente o el salto a la adolescencia. Así pues, ¿Qué ofrece esta revisión? Vamos a abordarlo.

Esta entrega sigue la historia habitual de todos los juegos de la saga principal de Pokémon, lo que viene a ser salir de casa por un incidente -en este caso provocado por nuestro amigo y rival- y crecer como persona y entrenador a base de explorar la región de turno, en este caso Sinnoh, ambientado en la isla de Hokkaido de Japón y con una gran cordillera montañosa dividiendo la zona. Tendrás que recorrer la región y sus rutas, combatiendo con cada entrenador que te encuentres por el camino, registrar el máximo número de Pokémon posibles en la Pokédex, ayudar al profesor regional en sus estudios, derrotar a los líderes de gimnasio y convertirte en el campeón de la región, de paso llevando al traste los planes del equipo malvado de turno.

Para los que hayan jugado a las anteriores ediciones la historia es más que conocida, pero para los que no hayan tenido la oportunidad de probar los primeros es mejor no dar mucha información de la historia y sus particulares giros, ya que podría arruinar un poco la experiencia y no querríamos eso, debido a que la gracia de estos títulos residen en el viaje y el cómo se realiza, por lo que hemos optado por evitar dar datos de la trama principal. Simplemente podemos decir que las diferencias argumentales con las entregas originales son prácticamente nulas.

De nuevo, tenemos una mecánica tradicional sin muchas sorpresas para el ritmo habitual de la serie: se trata de utilizar a tus Pokémon, ya sea el inicial o los capturados en las diferentes rutas en el trascurso de tu aventura (cada una tiene sus propias criaturas) para combatir en batallar de turnos alternos con una gran importancia de los tipos de los movimientos y cada criatura, ya que cada tipo es fuerte, débil o neutral a cada uno de los otros. También existen naturalezas o habilidades especiales que favorecen o limitan las características de nuestros Pokémon haciendo que cada uno sea único entre una amplia gama de opciones. Esta es la base, pero ahora centrémonos en los criterios que los más expertos quieren conocer:

El factor crianza en esta edición es tratado como en la original, no se facilita tanto como en las anteriores ediciones recientes, aunque sí que hay un guiño a ayudar a los jugadores. Se trata de cuando entablamos combate, si aparece el rostro de nuestro personaje por unos segundos eso quiere decir que el Pokémon salvaje tiene mínimo dos IV o valores genéticos perfectos, algo que ayudado de la aplicación del Poké-reloj para ver estas características hace que la crianza sea más ágil, pero también denota que no se ha puesto mucho interés en la vertiente competitiva, limitada por la sola presencia de una Pokédex que incluye criaturas hasta la cuarta generación, pero no posteriores.

A parte de esto, tenemos una mecánica ya implementada desde Pokémon Sol/Luna, y es que el juego te dice si los movimientos de tus Pokémon son más efectivos o menos dependiendo de su tipo siempre y cuando ya te hayas enfrentado un ejemplar de esa especie con anterioridad. Lo que ayuda a los jugadores que no tengan tan presente la tabla de tipos, fortalezas y debilidades. Podremos llevar hasta seis Pokémon en el equipo, aunque a diferencia del original en este podemos cambiarlos en cualquier momento de la aventura, ya que podemos acceder al PC desde el menú, como ya pudimos en Espada/Escudo. Esto facilita mucho las cosas a la hora de tener, por ejemplo, un hueco en el equipo para recibir el típico huevo que te dan en la aventura, ahorrándote el viaje al centro Pokémon, algo que en ciertos momentos se agradece.

Esto, unido a la elección de mantener el Repartir Experiencia activado sin posibilidad de apagar durante toda la partida hace que, en parte, resulte beneficioso porque permite un equilibrio en los Pokémon de tu equipo con respecto a la experiencia y los niveles que adquieren al ir avanzando la aventura, pero por otro lado permite rebajar la dificultad del juego en exceso en el transcurso normal del viaje, ya que los líderes de gimnasio enseguida quedan muy por debajo de los niveles de las criaturas que llevaremos en nuestro equipo. Aun con esto, no quiere decir que todo el juego vaya a resultar fácil, puesto que cuando llegamos a la Liga Pokémon es posible que aún con esto nos quedemos cortos de nivel y necesitemos entrenar un poco más, ya que el Alto Mando va incrementando sus niveles conforme vamos acercándonos al campeón.

Otro cambio es el sufrido en el Subterráneo, que, aunque mantiene sus funciones de poder excavar en las paredes y sacar objetos de ellas, entre las que se incluye unas estatuas de las que ya hablaremos, no tiene la posibilidad de enterrar gemas para que crezcan y hacer granjas de zonas para excavar como si se podía en los originales, ni tampoco encontramos las famosas trampas del subsuelo. El mapa del subterráneo es muy parecido al original, aunque han aparecido unas habitaciones en las que aparecerán Pokémon salvajes visibles, así como lo hacían en la zona salvaje en Espada/Escudo. Estos Pokémon también se equilibran en función del nivel del equipo Pokémon que tengamos, por lo que cada vez suben más de nivel y resultan más difíciles de capturar. Esto hace que resulten un buen punto para entrenar y también una gran forma de lograr criaturas que no serían accesibles en las rutas habituales del juego.

Las bases secretas con muebles han desaparecido, por lo que tendremos unas aperturas en las que poner las estatuas que encontremos excavando por ahí, algo que de ayudará a que aparezcan con más probabilidad los Pokémon de dichas estatuas en las grutas subterráneas. Existe la posibilidad de que estas estatuas sean de color verde, lo que multiplica aún más las posibilidades de que aparezcan esos Pokémon de las estatuas en esas grutas. Este factor puede controlarse ya que existe un minijuego de pisar Digglets y Dugtrio por el subterráneo, y cada vez que lo hagamos se ira llenando una barra que da mayores posibilidades de encontrar cajas con diseños extraños en las que aparecen estas estatuas de diferente color al de la piedra normal al picar en las paredes.

Siguen existiendo NPC en el subterráneo con los que interactuar y cambiar gemas que encontremos por objetos, aunque en este caso no serán para la base secreta como en los originales, sino que permitirán obtener objetos que nos ayuden en la aventura o de difícil obtención en la misma, como MTs raras y pedestales para nuestras estatuas. También podemos entrar en conexión a internet y encontrarnos a otros jugadores, con lo que posibilita más la interacción y la comunicación para combatir o cambiar criaturas, a la ya dada en la existencia de la Sala Unión, así como conseguir entrar en más bases secretas a conseguir banderas de estas como en los originales, ofreciendo beneficios al jugador en función de cuantas más banderas obtenga.

Como cambio relevante en esta edición aprovechando la presencia del Poké-reloj en el mismo, encontramos el uso de Movimientos Ocultos. En anteriores ediciones en algunos casos eran movimientos que podíamos enseñarles de manera indefinida a nuestros Pokémon para utilizarlos fuera de combate y ayudarnos a avanzar por la región, o también como monturas sin necesidad de enseñar esos movimientos. En esta edición se ha optado por mantener esos movimientos, pero como MTs, las cuales tendremos una única copia para enseñar como movimiento en combate, las cuales se gastan tras usarlas así que habrá que tener cuidado en elegir qué Pokémon aprende ese ataque.  Para utilizar en la exploración de los escenarios tendremos una aplicación en el Poké-reloj que nos permitirá usar esos movimientos. Esto es, necesitamos cortar un arbusto, accedemos a la app del Poké-reloj, y si nos han dado la MT del movimiento, seremos capaces de utilizarla, aunque para hacerlo llamamos a un Pokémon salvaje (suele ser un Bidoof o Bibarel, siguiendo la broma de Pokémon esclavo ya que para volar o despejar sale un Staraptor) para ayudarnos a poder pasar por esos lugares u obstáculos que nos impidan avanzar.

 

En total, la trama principal puede ser completada perfectamente entre unas 25 y 30 horas, en parte debido a que las rutas son exactamente como las del original, por lo que algunas tendrán puzles a resolver en ellas, e incluso un buen puñado de entrenadores que nos entretendrán. Esta entrega tiene fama de ser lenta en historia y desarrollo, además de las rutas largas en las que cuesta un tiempo considerable llegar de una ciudad a otra. Esto es atenuado en la revisión ya que desde el principio tenemos las zapatillas para correr, que ayuda a aligerar el movimiento y la aventura por la región. La bicicleta también se obtiene pronto en la aventura, y en este caso se puede alternar entre acrobática y de carreras en función de las necesidades de la ruta y de los puzles que se nos presenten. La bici carrera, aunque permite ir muy rápido, hace el manejo muy difícil, y especialmente en este remake su manejo es realmente complicado si buscas hacer algo con precisión, aunque la otra opción tampoco permite ser muy preciso en algunos casos, aunque tenga mejor manejo que la de carreras.

En esta edición encontramos la presencia de un contenido post-game que, aún tras terminar el juego, nos puede dar un buen puñado de horas de disfrute de nuestra aventura. Con la presencia de la Torre Batalla para combatir y conseguir objetos que nos ayudan en la crianza, y el Parque Hansa serán los grandes retos a batir en el juego tras la Liga, permitiéndonos en este último capturar a muchos Pokémon legendarios de ediciones anteriores, que por cierto algunos serán exclusivos de la edición que tengamos. Lo que sí tiene son los concursos Pokémon, siempre entretenidos como una variación competitiva y que gana nuevas especializaciones tras completar el juego principal. Con respecto a la dificultad en combate, la IA está bastante lograda, utilizando estrategias interesantes en los combates, sobre todo notable en las batallas contra líderes de gimnasio y Alto Mando o campeón regional de la Liga. Algunos Pokémon con los que cuentan han cambiado el set de movimientos con respecto a entregas previas, por lo que las estrategias a utilizar podrían variar durante el combate. 

Artísticamente, el juego ha sido renovado por completo para darle un aire nuevo pero simple, aunque fiel a los personajes en los juegos de DS en los que tenían cuerpos de proporciones nada normalizadas. Tiene un estilo “Chibi” o como muñecos pequeños cabezones y, aunque los escenarios se ven bastante bonitos en contrapartida, están vacíos y esto es debido a que es un remake hecho tal como es el original. No se ha querido innovar en rediseñar espacios, por lo que cuando entramos en viviendas o ciudades, o la misma base del enemigo, se observan muchos huecos vacíos y repetidos, dando esa sensación de añejo aun con los gráficos renovados, busca recrear ese ambiente de los juegos de antes sencillos en escenarios en el mapa, aunque los escenarios de batallas y animaciones de movimientos de los Pokémon si han sido rediseñados y son realmente agradables de ver.

Cuando los personajes tienen interacciones o conversaciones, aun estando en una escena, son inexpresivos en la mayoría y no dan esa sensación realista que acompañen a la situación, lo que provoca que se sientan aún más planos por el salto visual que conlleva entrar a combate, y por los juegos de cámara que hacen que se muestren mucho más de cerca o de diferentes perspectivas. Con lo ya citado anteriormente, se observa que el nivel gráfico es, por mucho, inferior a las ediciones anteriores de Espada/Escudo, creando además una mayor diferenciación visual entre exploración y combates -con diseños en 3D estilizado- debido al salto técnico de todo el desarrollo.

Otro gran problema es la destacable cantidad de fallos que presentó el juego en las primeras semanas, necesitando un parche de actualización el mismo día de salida, y otro unas semanas después para suplir fallos explotados por la gente para realizar bugs dentro del juego, como clonar o poder ir a por el legendario Shaymin. Con referencia al sonido, la Banda sonora del juego ha sido remasterizada y es muy disfrutable en cada momento del juego, ya que la Banda Sonora de Sinnoh era de las mejores de la serie y siempre es un placer tenerla en una mejor calidad, aunque esta tenga sutiles diferencias en algunas de sus composiciones. 

Por último, debemos mencionar la presencia del Pokémon siguiéndote durante toda la aventura rescatado de otras ediciones y que tanta gente había pedido desde que se supo del desarrollo de esta edición. Este, aunque bonito y gracioso supone un inconveniente en muchas ocasiones ya que se pone en nuestro camino en lugares estrechos o nos entorpece avanzar. Lo bueno es que, si esto sucede, el Pokémon se teletransporta a otra parte tras cierto tiempo, pero puede ser algo incomodo.

En líneas generales esta edición Perla Reluciente/Diamante Brillante es un remake clásico de Pokémon, en el más estricto sentido de la palabra. Es una copia literal en casi todo lo que era Perla/Diamante de DS, solo que, renovado estéticamente a este estilo tan peculiar, por ser el más aproximado al original. La Pokédex es la misma que la de Sinnoh de la época de los originales, por lo que no hay ningún Pokémon posterior a la cuarta generación. Si esperas algo nuevo y novedoso, desde luego aquí no lo vas a encontrar, pero si no jugaste a los originales o les guardas un especial cariño, es una buena forma de poder hacerlo sin tener la necesidad de conseguir una Nintendo DS.

Los puntos clave de este remake se reducen a la historia, conocida si fuiste jugador de los anteriores y si no es así resulta bastante disfrutable, aunque como la antigua tiene su dificultad, las mecánicas de combate son las mismas, incluyendo la gran presencia de combates dobles que hubo en esta generación. No se aprecia la intención de crear una comunidad de competitivo para combatir entre usuarios, aunque si la intención de tener una comunidad conectada para compartir en el subterráneo, aunque sus utilidades son limitadas. Y, bueno, luego estaría el debate de si gusta más o menos su aspecto visual.

Con esto dicho, es decisión de los jugadores si este juego es lo que buscan para pasar un rato rememorando su viaje por Sinnoh, o si es tu primera vez y quieres disfrutar de esta historia, tú decides si quieres invertir tu tiempo y dinero en él, pero en lo personal me lo he pasado bien recordando una entrega que guardo en el recuerdo. Dicho esto, ahora es turno de cada cual valorar si los cambios indicados son motivo o no de jugar al juego. Si tenéis preguntas o queréis compartir vuestras impresiones, podéis hacerlo en los comentarios o en nuestras redes sociales.